Imagen. Jeanne Baré. |
En
1522 Sebastian Elcano completa la primer circunnavegación del globo, pero para
que una mujer lo lograra tuvimos que esperar más de 250 años cuando Jeanne Baré (botánica) se embarco en una expedición francesa en 1766, junto a Commerson
otro botánico reconocido de la época. En este viaje científico el problema
principal que tuvo que enfrentar fue el hecho de ser mujer, ya que en esa época
las mujeres tenían prohibido realizar ese tipo de viajes por lo que tuvo que
hacerlo disfrazada de hombre.
Durante
dos años pudo mantener el secreto y realizar su trabajo junto a su colega
recolectando miles de muestras y catalogando otras tantas especies nuevas. Pero
en 1768 fue descubierta y violada por sus compañeros en Nueva Guinea, el viaje
prosiguió convirtiéndose en un calvario para ella que tuvo que permanecer
encerrada en su camarote por su seguridad, a esto hay que sumarle las penurias
de la falta de comida y agua fresca lo que trajo el escorbuto a la expedición.
El problema continuo hasta que seis semanas después pudieron re-abastecerse de
proviciones y Jeanne pudo mejorar en algo su calidad de vida, sobre todo
teniendo en cuenta que a raíz de la violación que sufrió, fue embarazada.
A
finales de 1768 llegan a Mauricio, donde Commerson y Baré hacen amistad con el
gobernador de la colonia, quien los hospeda en su casa. La expedición continua
sin ellos ya que deciden quedarse en la isla, desde donde viajan a Madagascar
para continuar recolectando y
clasificando especímenes. De regreso a Mauricio, Baré entrega a su hijo a un matrimonio
local y se pone a vivir en pareja con Commerson, pero la poca estabilidad que
logra se ve interrumpida por la muerte de su compañero en 1773.
Jeanne
sola y sin recursos se pone a trabajar como camarera y curandera, sirviendo
bebidas conoce a Jean Dubernat con quien se casa en 1774. Desde ese momento
comienza a firmar como Barret, tal vez como símbolo del comienzo de una nueva
vida. A finales de 1774 llega a Francia con su marido y el trabajo que realizo
durante 7 años junto a Commerson. En ese momento es que culmina la
circunnavegación del mundo luego de ocho años. La pareja se instala en la
ciudad natal de Dubernat, un dinero que Commerson le había dejado en su
testamento a Jeanne los ayuda en un comienzo.
En
1783 es reconocida por el gobierno francés por su travesía y su trabajo de
botánica, otorgándole una pensión vitalicia. Fallece el 5 de agosto de 1807. Su
trabajo científico y la proeza del viaje no son muy conocidas hoy en día como debería,
tal vez por ser mujer o por pura mala suerte, pero esto no lo hace menos
valioso que el viaje de Delcano o cualquier otro explorador o científico de la
época.
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